La telepatía es una habilidad especial que CRUEL les dio a los sujetos Teresa, Thomas, Aris y Raquel (mediante los neutralizadores) con el fin de que pudieran comunicarse a través de sus pensamientos, independientemente de dónde se encontraran.
Teresa perdió esta habilidad luego de que CRUEL le quitara el neutralizador en Cura Mortal, aunque como ni Thomas ni Aris pasaron por esto, se supone que deberían poder seguir haciéndolo.
Esta habilidad, al ser artificial, puede interrumpirse y espiarse mediante una máquina alterna. También se puede enviar mensajes sin necesidad del implante, pero sería sólo en una unidad fija.
Procedimiento[]
En el libro, se explica que Thomas debía dejar la mente en blanco y concentrarse en la cara de la persona con la que quería hablar. Al principio, le costó mucho dominar esta habilidad, pero terminó siéndole de utilidad al poder hablar con Teresa en numerosas ocasiones.